Donde el corazón te lleve es una novela
cortita que se lee en un periquete. Narra la historia de Olga, una anciana que
ha criado a su nieta. Ahora, con la adolescencia de ésta y la edad del pavo y
todo eso, se han distanciado. No recuerdo si llega a mencionarse el nombre de
la nieta, pero el caso es que la joven se marcha un año a Estados Unidos, para
ordenar su vida, tener una experiencia de juventud, etc. Olga se queda en casa,
en Trieste, respetando un acuerdo según el cual ni se llamarían ni se
escribirían. Pero un día se siente mal. Es ya anciana y, viendo el rostro
oscuro de la Parca aproximándose, piensa en lo que entre su nieta y ella queda
por decir.
La novela es
un alegato a favor de decir siempre las cosas, a no callarnos, porque ya dice
Olga que “los muertos pesan, no tanto por la ausencia, como por todo aquello
que entre ellos y nosotros no ha sido dicho”. De manera que decide escribir una
carta a su nieta, una carta que jamás enviará, respetando el acuerdo, pero que
permanecerá en la casa por si se diera la circunstancia de que la nieta
volviera y la encontrara vacía y deshabitada. En ella Olga desnudará sus
sentimientos, contará todo aquello que su nieta le ha preguntado sobre su madre
y que ella jamás tuvo fuerza para contar, y tratará de lograr un acercamiento
entre ambas que ni la muerte pueda quebrar.
Leyendo las
primeras páginas de la novela lo cierto es que me puse muy tontorrón, no tanto
por la novela en sí, sino porque me acordaba de mi propia abuela. Yaya, allá
donde estés seguro que es un sitio genial y estás muy bien. Sabes que te
queremos mucho. No te preocupes por nosotros, que vamos tirando, aunque seguro
que tú nos ves desde allá.
En fin, luego
la novela se aparta de este tema, centrándose en la relación entre nieta y
abuela, en la historia familiar y en todo lo que ha pasado entre unas y otras.
No tiene nada que ver realmente, fuera de haber una estrecha relación entre un
nieto y un abuelo, pero me hizo recordar un poco La sonrisa etrusca. Lo cierto es que la novela de Sampedro me gustó
mucho más. No es que ésta esté mal, para nada. Según parece fue un enorme éxito
en Italia, y consagró a Susanna Tamaro. La novela está muy bien. Es solo que,
bueno, si no la lees, tampoco pasa nada.
Lo que más me
ha gustado de ella es que narre historias o rencillas familiares, pensamientos
más o menos profundos, meditaciones, anécdotas y hasta desgarros sentimentales,
siempre manteniene un tono como de charla. No sientes que estés leyendo un
libro, sino que estás cómodamente sentado en casa de Olga, con ella delante,
manteniendo una agradable conversación. Bueno, tú no hablas, solo ella, pero el
tono es tan agradable, tan ligero, que no parece una narración pesada, sino
eso, una charla íntima entre dos buenos amigos. Olga habla de su vida y a
menudo se deja llevar por pensamientos y divagaciones. No lleva un orden claro,
aunque nunca se siente confusión ni desorden. Cuenta, al hilo de la historia
principal, detalles cotidianos, anécdotas cercanas. Y a veces se deja llevar por
pensamientos profundos que, sin embargo, casi siempre clarifica con algún
ejemplo metafórico, como cuando habla así del río meditando sobre cómo se ha
dejado llevar en su vida: “Alguien, o el viento, de pronto, te arroja a la corriente
de un río. Gracias a la materia de que estás hecha, en vez de hundirte, flotas;
eso ya te parece una victoria y, por lo tanto, inmediatamente, empiezas a
viajar; te deslizas veloz según la dirección que te impone la corriente; de vez
en cuando, a causa de alguna maraña de raíces o de alguna piedra, te ves
obligada a detenerte; allí permaneces un tiempo, golpeada por las aguas
agitadas; después el agua sube y te libera, avanzas nuevamente; cuando la
corriente es tranquila te mantienes en la superficie, cuando hay rápidos el
agua te sumerge; no sabes hacia dónde estás yendo ni te lo has preguntado
nunca; en los trechos más tranquilos tienes ocasión de observar el paisaje, las
riberas, los matorrales; más que los detalles ves las formas, los colores, vas
demasiado rápido para ver más; después, con el tiempo y los kilómetros, las
riberas son cada vez más bajas, el río se ensancha, todavía tienes márgenes,
pero por poco tiempo. ¿Adónde estoy yendo?, te preguntas entonces, y en ese
momento se abre ante ti el mar”.
Y así, con
confidencias, con consejos, con sinceridad, Olga habla sobre sus errores y
aciertos, sobre sus sentimientos, sobre una vida que, aunque haya tenido los
suficientes alicientes como para hacer entretenida una novela, su mayor virtud
es que es una vida como cualquiera, cercana. La manera íntima en que la cuenta
y lo sencillo, en su complejidad, de su vivir, hacen que las páginas de la
novela de deslicen raudas entre los dedos. Una novela que, quizá no es la más
impresionante que he leído, pero que, en su escasa duración deja entrever una
profundidad explorada con tal sencillez que te provoca un algo dentro, algo
indescriptible, y una cierta identificación y empatía con los personajes; esa
sensación que ya he mencionado de estar sentado con Olga, charlando. Y es algo
que otras novelas no me han provocado.
-Título:
Donde el corazón te lleve.
-Autor:
Susanna Tamaro.
-Género:
Narrativa.
-Editorial:
Booket.
-Precio:
7,95€.
-Isbn:
9788432217548.
-Alma:
de confidencias y recuerdos, de sabiduría de vida y esperanza.
No hay comentarios:
Publicar un comentario